Hola María.
Lo que yo te aconsejaría es, en primer lugar, convertir el momento de la comida en un momento familiar, donde charlamos todos juntos y por qué no, nos motivamos. Si es necesario, al principio puedes ir buscando formas de motivarle a estar sentado en la mesa: su postre favorito, ir a algún sitio después de comer, usar premios… Y siempre reforzar su buena conducta con nuestras palabras.
Hacer que el momento de la comida no se haga aburrido es algo importante, podemos intentar hacer algún juego, o crear momentos entretenidos durante la comida.
También es necesario tener muchísima paciencia, cuando nos estresamos o ponemos nerviosos lo único que conseguimos es que ellos se pongan más nerviosos aún.
Es importante entrenar en hábitos y runitas durante el día. Es decir, suponemos que ya tendrás algunas rutinas fijadas en tu día a día, de no ser así, puedes abrir otra consulta y así te asesoro sobre el tema más detenidamente.
Otro consejo, es intentar que los platos sean atractivos o entretenidos, así seguro que les motiva más el hecho de sentarse a la mesa.
Por último, aunque debemos tener normas y límites no podemos ignorar la personalidad de los hijos. Está claro que necesitan moverse, es parte de su forma de ser y no podemos prohibírselo, ten esto en cuenta y procura dejarle su espacio, si no, será aún peor.
¡Espero haberte ayudado!